¿Dinosaurios y Seres Humanos? La historia en Acámbaro, Guanajuato.
Por: El Ánima de Coyoacán.
Ciudad de Acámbaro, Guanajuato, Mexico.
animadecoyoacan@hotmail.com
Los Oparts (OPARTS-out of place artifacs)
significa objetos fuera de contexto son artefactos que supuestamente no
coinciden en tiempo y espacio.
Las Figuras del Museo Waldemar Julsrud.
El Museo Waldemar Julsrud se encuentra en
Acámbaro, Guanajuato, y exhibe piezas que el arqueólogo alemán encontró desde
1942, en las periferias del cerro del Toro.
Las Piezas hacen referencia inmediatamente
a una era de los grandes reptiles, o figuras amorfas que dan apariencia de
dinosaurios, aquí cabe aclarar que los grandes saurios de extinguieron hace más
de 65 millones de años y el ser humano para poder hacer una figura así teniendo
alguna referencia visual y su capacidad de inteligencia solo pudo haberlas
hecho cuando mucho hace 4500 años antes de nuestra era.
Si de por sí, ya la colección es polémica
por la representación de los saurios o figuras reptiloides, sumemosle que hay
figuras de “Bestias Exóticas”, “Diferentes razas humanas” y “Hombres-Bestia”
desnudos o con algún artilugio.
Para Waldemar Julsrud demostraban que “o el
hombre en su estado primitivo vivió desde los remotos días de la creación al
lado de temibles bestias antediluvianas, o estas existieron todavía millones de
años después de las épocas, en que autoridades en arqueología las considero
extintas de la Tierra”.
Las mediciones realizadas en 1968 por el
Laboratorio de Isótopos Inc. de New Jersey, a partir de las pruebas del carbono
14, fechan algunas de las figuras entre los años 1.110 antes de Cristo y 4.530
antes de Cristo En 1972, otras pruebas, esta vez mediante termoluminiscencia,
realizadas por la Universidad de Pensilvania sobre 2 figuras, situaban su
modelación en 2.500 años a.C. A pesar de que las pruebas se hicieron tan solo a
unas pocas figuras, los resultados son concluyentes.
Las Piezas que reunió Waldemar Julsrud,
aparte de las que parecen dinosaurios también tiene una colección extensa de
figuras de la cultura Chupícuaro que se desarrolló en la misma área y que datan
del 800 al 200 antes de nuestra era.
Esta colección llegó a contar con 33 mil
piezas; actualmente sólo quedan 20 mil, incluyendo un pequeño lote de objetos
arqueológicos. Algunas piezas “antediluvianas” se han prestado para
exposiciones temporales en las ciudades de Interlanken, Berlín, Nagoya, Pennsylvania,
Tokio y Viena; lo cual indica el interés
por la colección.
Ahora vamos a otra versión sobre este
mismo tema, hay personas que están convencidas, que las pruebas de
termoluminiscentes y de carbono 14 no son suficientes para determinar la
antigüedad de la pieza, sino únicamente de la materia. Podría ser que en el
yacimiento se encontrara verdadera arcilla de hace 4.000 años, pero las figuras
hubieran sido fabricadas a posteriori. Otilón Tinajero era el que le proporcionaba
muchas de estas figuras al Waldemar Julsrud y que lo ayuda en el descubrimiento: tal como admitió tanto
el propio Julsrud como sus descendientes y los propios responsables del museo,
Waldemar pagó dinero por cada pieza encontrada, y hace suponer que sólo unas pocas de las piezas sean
reales y daten de la época que se les presupone, pero el resto podían haber
sido moldeadas personalmente por Otilón, y las figuras serian fruto de su propia imaginación.
Las figuras están a la vista del público
para que cada quien saque sus propias conclusiones.
Hola Ánima, la interacción humana con dinosaurios a pesar de ser considerada como imposible está documentada, por ejemplo las huellas de Glen Rose Texas donde las huellas están casi una sobre otra, las famosas piedras de Ica sobre las que podemos ver figuras humanas sobre aparentes dinosaurios o las figuras talladas en el templo de Angkor Wat en Camboyano en donde se puede ver claramente la figura de lo que aparenta ser un stegosaurio, este templo presenta otras figuras en extremo raras, entre ellas un astronauta.
ResponderBorrarLa cuestión aquí es si los humanos aparecieron antes de lo que dice la ciencia o si los dinosaurios no desaparecieron del todo y convivieron con los humanos por un buen tiempo.